Nutrición

SEMILLAS MILENARIAS

Las semillas prehispánicas de México proveen beneficios en la salud de las personas que viven con diabetes, en especial la chía, cacao, amaranto y pepitas de calabaza son ricos en componentes llamados bioactivos (polifenoles, carotenoides, fitoestrógenos, fibra, ácidos grasos, péptidos bioactivos). Investigaciones recientes indican que los componentes de estas semillas tienen efecto beneficioso sobre la mejora de perfil lipídico en sangre a través de sus efectos hipotensores, hipoglucemiantes antimicrobiano e inmunoestimuladores;  este grupo de alimentos forma parte de la dieta de los mexicanos desde tiempos antigüos. De acuerdo con datos de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura  (FAO) México actualmente es uno de los países con mayor consumo de productos ultra procesados en todo mundo, esta situación podría  cambiar, si se educa y fomenta consumir los alimentos y semillas locales, que forman parte de nuestra cultura e identidad como pueblo. Las últimas tendencias de alimentación saludable en países desarrollados incorporan semillas mexicanas ancestrales en diferentes presentaciones  como pudines de chía, ensaladas con semillas de calabaza, muesli de chía, amaranto tostado en tostadas con aguacate, pastel que sustituye huevo por chía en gel. 

Datos de la Secretaria de Comercio estiman que al año se exportan 4,893 toneladas de semillas entre ellas la chía a 29 países como Alemania, Países Bajos Japón, Estados Unidos, Emiratos Árabes.  

Enseñemos a nuestra gente que vive con diabetes que la chía no sólo se consume en agua con limón, que son semillas asequibles y disponibles en casi todo tianguis y  mercados a lo largo de todo el país. Fomentemos su consumo en la población. Los beneficios que tiene a la salud el consumo de semillas milenarias mexicanas y de muy bajo costo, asequibles en México.

CONCLUSIÓN

Los mexicanos tenemos derecho a alimentarnos de forma saludable, consumiendo alimentos locales, frescos, que nos identifican como pueblo, más aún como comunidad de las personas que viven con diabetes. Las semillas están siendo consumidas en otros países desarrollados como “súper alimentos” los llevan a sus mesas como “muesli”, “pudín”.

Mi gente, mi México no debe privársele, debe ser partícipe y  ser consumidor activo, conocedor,  que genere  nuevas propuestas de alimentación para vivir mejor.

¡Incluye  semillas saludables y locales a tu plan!

Lic. Dulce María Cervantes González

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